Seguimiento de la partida de DnD los sábados en Can Batllori.
22 junio 2005
Las divagaciones de Kang Siino: Hasta los mismos del pantanito
Señor Kossuth, duras son tus pruebas. He soportado humillaciones por tí en el pasado, y he afrontado los desafíos que me envías con entereza, pero mi Ardiente Señor, empiezo a preguntarme si he caído en desgracia a tus ojos.
Por dos veces he contraído esa asquerosa enfermedad que envenena mi cuerpo y devora mis pulmones, que parece apoderarse de mi mismo ser. Por dos veces hemos tenido que recurrir a esa vieja bruja. Pero tener que satisfacer sus asquerosos deseos de sexo, fue casi demasiado. Sin embargo, sólo superando tus desafíos creceré en tu fe, mi Señor. Además, no podía decepcionar a Shandri. Después de la magnanimidad que ha demostrado, no puedo entender cómo pude desearle mal en otras ocasiones. ¿Cómo pude dejar de ver que lo que hace es sólo por nuestro bien?
Pero hay algo que no deja de darme vueltas en la cabeza, o Luz en la oscuridad. ¿No estaría mejor con mis antiguos señores que con este grupo? Algo en mi interior me sugiere que quizá, en un combate, cuando estén heridos, podría acabar con ellos. Entonces, siento auténtica rabia al conocer esa maldad que habita en mi y espera agazapada a que mi voluntad flaquee.
No cederé.
Por dos veces he contraído esa asquerosa enfermedad que envenena mi cuerpo y devora mis pulmones, que parece apoderarse de mi mismo ser. Por dos veces hemos tenido que recurrir a esa vieja bruja. Pero tener que satisfacer sus asquerosos deseos de sexo, fue casi demasiado. Sin embargo, sólo superando tus desafíos creceré en tu fe, mi Señor. Además, no podía decepcionar a Shandri. Después de la magnanimidad que ha demostrado, no puedo entender cómo pude desearle mal en otras ocasiones. ¿Cómo pude dejar de ver que lo que hace es sólo por nuestro bien?
Pero hay algo que no deja de darme vueltas en la cabeza, o Luz en la oscuridad. ¿No estaría mejor con mis antiguos señores que con este grupo? Algo en mi interior me sugiere que quizá, en un combate, cuando estén heridos, podría acabar con ellos. Entonces, siento auténtica rabia al conocer esa maldad que habita en mi y espera agazapada a que mi voluntad flaquee.
No cederé.
21 junio 2005
El Master habla
Tras pasar la ciudad de Tyraturos, y tras algun encuentro fortuito con los ogros hambrientos (de carne humana y algo de pan para acompañar) fuisteis alcanzados por la perversa Shandri que os ofrecio dos opciones: servirle para un ultimo trabajo o ser cazados uno a uno.
En un alarde de prudencia decidisteis seguirle el juego, de modo que os teletranporto a los Pantanos Sombrios (Umber Marshes) que separan Thay de Aglarond para buscar una capa llamada El Abrazo del Diablo.
Shandri contaba con la pista de un mago llamado Zarlagg que habia ido tras la capa un tiempo antes.
Os metisteis en el sucio y apestoso pantano dispuestos a dar con la cabaña del mago y al cabo de unos días llegasteis. Allí disteis con las notas de Zarlagg que hablaban de los sitios del pantano que había explorado: La cabaña de Slurrozh, El puente de los Ghouls, y el alcázar de las rocas frías, donde creía que estaba la capa.
Otros pintorescos puntos de interes turistico incluian el Ejercito Perdido, El campo de barro, el Hambre, y un taller de elaboració de zuecos muy hogareño...
En un alarde de prudencia decidisteis seguirle el juego, de modo que os teletranporto a los Pantanos Sombrios (Umber Marshes) que separan Thay de Aglarond para buscar una capa llamada El Abrazo del Diablo.
Shandri contaba con la pista de un mago llamado Zarlagg que habia ido tras la capa un tiempo antes.
Os metisteis en el sucio y apestoso pantano dispuestos a dar con la cabaña del mago y al cabo de unos días llegasteis. Allí disteis con las notas de Zarlagg que hablaban de los sitios del pantano que había explorado: La cabaña de Slurrozh, El puente de los Ghouls, y el alcázar de las rocas frías, donde creía que estaba la capa.
Otros pintorescos puntos de interes turistico incluian el Ejercito Perdido, El campo de barro, el Hambre, y un taller de elaboració de zuecos muy hogareño...
27 mayo 2005
Las divagaciones de Kang Siino: Huida
¡Mi señor Kossuth! Tu pones pruebas en el camino de tus fieles para separar a los que no son dignos. ¿Soy yo digno, mi Señor? Eso espero.
Había alguien más con nosotros en la torre. Otro mago rojo, que su alma pustulenta se pudra en Baator. Nos ofreció la posibilidad de escapar, si matábamos al discípulo del mago. Interesante disyuntiva... matar a un mago rojo, obedeciendo las órdenes de otro. Al final, decidimos hacerlo, y pudimos salir de allí.
Pude ver una de tus criaturas, mi señor. Las llamas de la salamandra y su calor me hacían sentirme más próximo a ti. Después de mi encuentro con ellas me siento más fuerte.
Ahora, hemos llegado a la conclusión de que nuestra ama nos quería muertos junto con el mago. Es muy posible que nos de por muertos. Por tanto, decidimos marcharnos de allí. Espérame, ¡oh cabrón que nos utilizaste para tus propósitos!, quizá algún día vuelva a por tí.
Todos estamos ahora en la misma situación, y era el momento de sincerarme con mis compañeros. Después de explicarles mi historia, no me ha gustado el brillo que vi en los ojos del bardo. Creo que le interesa más la historia que pueda sacar de lo que le he contado que mi dolor. Quién sabe, tal vez algún día yo pueda volver la vista atrás y recordar sólo la historia, sin que la cara de esa niña se me aparezca a todas horas.
Ahora, sólo nos queda huir.
Había alguien más con nosotros en la torre. Otro mago rojo, que su alma pustulenta se pudra en Baator. Nos ofreció la posibilidad de escapar, si matábamos al discípulo del mago. Interesante disyuntiva... matar a un mago rojo, obedeciendo las órdenes de otro. Al final, decidimos hacerlo, y pudimos salir de allí.
Pude ver una de tus criaturas, mi señor. Las llamas de la salamandra y su calor me hacían sentirme más próximo a ti. Después de mi encuentro con ellas me siento más fuerte.
Ahora, hemos llegado a la conclusión de que nuestra ama nos quería muertos junto con el mago. Es muy posible que nos de por muertos. Por tanto, decidimos marcharnos de allí. Espérame, ¡oh cabrón que nos utilizaste para tus propósitos!, quizá algún día vuelva a por tí.
Todos estamos ahora en la misma situación, y era el momento de sincerarme con mis compañeros. Después de explicarles mi historia, no me ha gustado el brillo que vi en los ojos del bardo. Creo que le interesa más la historia que pueda sacar de lo que le he contado que mi dolor. Quién sabe, tal vez algún día yo pueda volver la vista atrás y recordar sólo la historia, sin que la cara de esa niña se me aparezca a todas horas.
Ahora, sólo nos queda huir.
Las divagaciones de Kang Siino: Otra misión de nuestra ama
La entrega de los tomos a ese mago no podía haber ido peor. Ya antes de llegar a la ciudad nos encontramos con un mago rojo que quería los tomos. Parece que alguien le había avisado. Por Kossuth que odio el Thay. Ojala mis ancestros Rashemi hubiesen vuelto a Rashemen, en lugar de quedarse aquí.
El mago no supuso un gran problema para el grupo. De hecho, yo no llegué a reaccionar antes de que lo abatieran. Lo que pasó luego... prefiero no pensarlo. Creía que podía controlar mi odio, pero a la hora de la verdad no pude reprimirme. Mis compañeros me miraban con extrañeza, y no parecieron creer mi versión de que 'me pareció que se movía'.
La llegada a la ciudad tampoco fue bien. Uno de los guardias pareció reconocerme. Me pregunto si hay una orden de búsqueda contra mi.
Una vez en la torre, entregamos el libro. El mago rojo nos despachó inmediatamente. Para nosotros fue una auténtica suerte, ya que apenas marcharnos se produjo una explosión que lo mató. ¡Uno menos, mi señor, uno menos! Acto seguido tuvimos que defendernos de los guardias, que nos acusaban de asesinar a su amo, envueltos en una densa niebla. Acabamos con ellos, sólo para encontrarnos encerrados como ratas, sin poder salir de la torre. ¡Ah, mi señor, qué duras son tus pruebas!
El mago no supuso un gran problema para el grupo. De hecho, yo no llegué a reaccionar antes de que lo abatieran. Lo que pasó luego... prefiero no pensarlo. Creía que podía controlar mi odio, pero a la hora de la verdad no pude reprimirme. Mis compañeros me miraban con extrañeza, y no parecieron creer mi versión de que 'me pareció que se movía'.
La llegada a la ciudad tampoco fue bien. Uno de los guardias pareció reconocerme. Me pregunto si hay una orden de búsqueda contra mi.
Una vez en la torre, entregamos el libro. El mago rojo nos despachó inmediatamente. Para nosotros fue una auténtica suerte, ya que apenas marcharnos se produjo una explosión que lo mató. ¡Uno menos, mi señor, uno menos! Acto seguido tuvimos que defendernos de los guardias, que nos acusaban de asesinar a su amo, envueltos en una densa niebla. Acabamos con ellos, sólo para encontrarnos encerrados como ratas, sin poder salir de la torre. ¡Ah, mi señor, qué duras son tus pruebas!
Las divagaciones de Kang Siino
Ahora ya lo saben. No podia hacer otra cosa, ya que el fuego oscuro es
lo que mas daño podia causar a los esqueletos.
Antes, le habia explicado todo al enano. Creo que es el mas de fiar
del grupo. Siempre esta quejandose y murmurando, pero algo en el me
inspira confianza. Me aconsejo prudencia. ¡Ah, como si no lo supiera,
amigo enano!
El mundo es un lugar de locos. Despues de haber huido vuelvo, contra
mi voluntad, al Thay. ¡A cualquier sitio menos aqui, mi señor
ardiente, a cualquier sitio menos aqui! Y sin embargo, siento que tu
mano me guia, ¡oh Kossuth.! ¿Por que, si no, iba a acabar como esclavo
en esta familia de fieles seguidores tuyos?
Y ademas, metido en un grupo de locos. No se quien me inspira mas
recelo, si el loco seguidor de Tempus, o ese gnomo robamagia. Recuerdo
haber oido hablar de los SpellThieves. Tenian mala fama. Claro que
tambien los que esgrimimos el poder oscuro la tenemos, ¡si lo sabre
yo! Tampoco acabo de fiarme del bardo. Su incontinencia verbal puede
hacer que me encuentren. Y si es asi, me espera un destino mucho peor
que la muerte.
De todos modos, es lo que merzco. La imagen de esa niña sigue haciendo
temblar mi mano. No podre quitarmela nunca de la cabeza, y menos aqui
en el Thay...
lo que mas daño podia causar a los esqueletos.
Antes, le habia explicado todo al enano. Creo que es el mas de fiar
del grupo. Siempre esta quejandose y murmurando, pero algo en el me
inspira confianza. Me aconsejo prudencia. ¡Ah, como si no lo supiera,
amigo enano!
El mundo es un lugar de locos. Despues de haber huido vuelvo, contra
mi voluntad, al Thay. ¡A cualquier sitio menos aqui, mi señor
ardiente, a cualquier sitio menos aqui! Y sin embargo, siento que tu
mano me guia, ¡oh Kossuth.! ¿Por que, si no, iba a acabar como esclavo
en esta familia de fieles seguidores tuyos?
Y ademas, metido en un grupo de locos. No se quien me inspira mas
recelo, si el loco seguidor de Tempus, o ese gnomo robamagia. Recuerdo
haber oido hablar de los SpellThieves. Tenian mala fama. Claro que
tambien los que esgrimimos el poder oscuro la tenemos, ¡si lo sabre
yo! Tampoco acabo de fiarme del bardo. Su incontinencia verbal puede
hacer que me encuentren. Y si es asi, me espera un destino mucho peor
que la muerte.
De todos modos, es lo que merzco. La imagen de esa niña sigue haciendo
temblar mi mano. No podre quitarmela nunca de la cabeza, y menos aqui
en el Thay...
12 mayo 2005
Extracto de las crónicas de Jaskier
Tal y como lo recuerda Jaskier el Bardo, tras su noche en el calabozo...
"Bienaventurado servidor de Kossuth.
Bella sierva de la llama,
voy a narraros nuestra aventura de como conseguimos el libro del mago.
Partimos con el alba hacia donde nos indicasteis
el sol subía cual joya brillante sobre océano
sin más dilació que la marcada por las piernas del enano
nos acercamos al destino.
Pero oh pardiez fuimos atacados beliciosos gnolls i terribles goblins
nos acecharon
mas fueron abatidos pues poderosos son los brazos del bárbaro, del
enano y del servidor de Tempus, la sangre corría como ríos en honor a
vuestra deidad.
Llegamos a destino como mar embravecido nos dispusimos a entrar
y allí encontramos decenas de goblins que el lugar reclamaban como suyo
como una ola justicera acabamos con ellos, sin piedad fueron ahogados
por nuestros golpes.
En el camino hasta un río encontramos y entonces pensé en vos mi señora
que sois oscura y misteriosa como el agua que fluye por esa cueva,
pero ese no era el camino y finalmente la sala del antiguo mago encontramos
allí gracias a la astucia conseguimos el libro deseado, sin más
dilación volvimos
y como el agua que retorna al mar a través de los ríos aquí estamos."
¿Por qué me miráis de esta forma tan severa mi señor?, No apreciáis mi arte?
"Bienaventurado servidor de Kossuth.
Bella sierva de la llama,
voy a narraros nuestra aventura de como conseguimos el libro del mago.
Partimos con el alba hacia donde nos indicasteis
el sol subía cual joya brillante sobre océano
sin más dilació que la marcada por las piernas del enano
nos acercamos al destino.
Pero oh pardiez fuimos atacados beliciosos gnolls i terribles goblins
nos acecharon
mas fueron abatidos pues poderosos son los brazos del bárbaro, del
enano y del servidor de Tempus, la sangre corría como ríos en honor a
vuestra deidad.
Llegamos a destino como mar embravecido nos dispusimos a entrar
y allí encontramos decenas de goblins que el lugar reclamaban como suyo
como una ola justicera acabamos con ellos, sin piedad fueron ahogados
por nuestros golpes.
En el camino hasta un río encontramos y entonces pensé en vos mi señora
que sois oscura y misteriosa como el agua que fluye por esa cueva,
pero ese no era el camino y finalmente la sala del antiguo mago encontramos
allí gracias a la astucia conseguimos el libro deseado, sin más
dilación volvimos
y como el agua que retorna al mar a través de los ríos aquí estamos."
¿Por qué me miráis de esta forma tan severa mi señor?, No apreciáis mi arte?
06 mayo 2005
Oda a kossuth
Como mola el fuego
como mola el fuego
tu lo puedes provocar
pásame el mechero
pásame el mechero
todo lo vamos a incendiar
(Jaskier el bardo)
como mola el fuego
tu lo puedes provocar
pásame el mechero
pásame el mechero
todo lo vamos a incendiar
(Jaskier el bardo)
30 abril 2005
Resumen del master fascista (fascista por definición de master)
Os despertasteis en la bodega del Angelina atados y amordazados y, tras unos cuantos dias de viaje por mar, pudisteis ver, que empezabais a remontar un rio, para internaros en Thay. Llegasteis a una cascada y alli el (ahora) capitan Dusky os vendió a un tratante de esclavos llamado Reg Neroz, quien os llevó encerrados en carros, hasta la agradable villa de Amruthar, famosa por sus embutidos y su industria de acordeones.
Alli, tras una puja fuisteis adquiridos por una chica bastante guapa llamada Shandri (nota: este nombre va a ir cambiando hasta que de con uno con el que sea imposible hacer juegos de palabaras idiotas :) que os llevó a la finca de su padre, un poderoso clérigo de Kossuth llamado Kethot.
El tipo parece muy serio y estricto y dispuesto a azotaros hasta la muerte (o inconsciencia, segun el humor del dia) y os reconoce como grupo de ex-aventureros, asi que os encarga una mision aparentemente sencilla: ir a la torre derruida de un antiguo nigromante y recuperar sus libros de conjuros para unos alumnos suyos (del nigromante).
Ahora estais en una entrada subterranea a la torre masacrando goblins (llamame clasico)
Alli, tras una puja fuisteis adquiridos por una chica bastante guapa llamada Shandri (nota: este nombre va a ir cambiando hasta que de con uno con el que sea imposible hacer juegos de palabaras idiotas :) que os llevó a la finca de su padre, un poderoso clérigo de Kossuth llamado Kethot.
El tipo parece muy serio y estricto y dispuesto a azotaros hasta la muerte (o inconsciencia, segun el humor del dia) y os reconoce como grupo de ex-aventureros, asi que os encarga una mision aparentemente sencilla: ir a la torre derruida de un antiguo nigromante y recuperar sus libros de conjuros para unos alumnos suyos (del nigromante).
Ahora estais en una entrada subterranea a la torre masacrando goblins (llamame clasico)